Valores humanos

Los mejores cuentos infantiles ordenados según los valores humanos que representan. Cuentos que transmiten los valores humanos y virtudes a los niños.

Cuentos con Valores Humanos:

CUENTOS PARA DORMIR

Un cuento le conté
a mi hijo José,
y cuando se durmió
al rato despertó.

Un cuento le conté
a mi hijo José,
y cuando se durmió
después se despertó.

Otro cuento le conté
a mi niño José,
y cuando se durmió
al rato despertó,
y ya le dije yo:

«Te tienes que dormir,
que cinco cuentos llevo,
y me vas a hacer morir,
que yo también quiero dormir!!»

 

Los cuentos para dormir son una herramienta fantástica para los niños; pero niños: ¡os tenéis que dormir de verdad!

Nos cuentan nuestros lectores, que sus hijos necesitan de varios cuentos para llegar a dormirles. Que son fantásticos, pero que les gustaría que con sólo dos cuentos pudieran llegar a dormirse.

Y tú, ¿cuántos cuentos cortos necesitas para dormir?

Déjanos tu comentario!!

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SAPITO Y SAPON

Un tío llamado Sapón vivía con su sobrino Sapito dentro de un amplio estanque de aguas verdes sobre las que también flotaban muchas hojas de Jacintos y Lentejas.

Sapón era bien gordote y comía sin descansar mientras que Sapito era delgado, y bastante estirado, por lo que trepaba con bastante frecuencia hasta una estatua con un jarrón que crecía en medio del estanque.

Sapito saltaba y en ocasiones corría mientras que Sapón se burlaba de él diciéndole: estás más flaco que una cuerda floja, si continúas saltando y sin comer te voy a ver más seco que una espina de pescado.

Pero Sapito no escuchaba a su tío con sus burlas, ni Sapón detenía su alargada lengua que salía continuamente de su ancha boca para atrapar mosquitos, larvas de mariposas y moscas.

Espinita, espinita, espina de pescado—Le decía Sapón a su sobrino a la vez que rodaba hacia los lados y se arrastraba por sus grandes risotadas. Sigue leyendo

MUKI, LA PRINCESITA DE LA VERDAD

Muki era una niña de 5 años, hija de la reina Mukota que gobernaba todas las tierras del reino.

A Muki la llamaban «la princesita» por lo pequeñita que era. Todo el mundo estaba encantado con ella, siempre sonreía a la gente que veía pasar.

Con la misma edad de 5 años, un día triste, su madre murió, y debido a que su padre había desaparecido hacía algunos años, la princesita Muki era la única heredera.

Princesa3

Un día de primavera coronaron a Muki la princesita, como la nueva reina de todas las tierras.

Muchos de los ciudadanos del reino no confiaban en Muki para gobernar, ya que decían que era muy pequeña todavía y que iba a llevar al reino a la más profunda pobreza.

Pero Muki había estado siempre al lado de su madre, mientras ella gobernó, y como Muki era muy inteligente aprendió muchas cosas de cómo gobernar. Pero sobre todo, aprendió a ser sincera.

Uno de los antiguos consejeros de la reina, Picato, estaba convencido de que si conseguía crear desconfianza sobre la nueva pequeña reina, Sigue leyendo

MOBILETE Y EL TELEFONO MOVIL INTELIGENTE

Había una vez, un teléfono móvil, llamado Mobilete, que había pasado toda su vida junto a un chico llamado Pedro.

Pero llegó un día, en que Pedro quiso cambiar de teléfono porque Mobilete ya no estaba a la última.

Habían salido al mercado los nuevos teléfonos móviles inteligentes, y Pedro quería ahora uno de esos. Así que fue a la tienda y se compró un teléfono móvil nuevo.

Cuando Pedro llegó a su casa, rápidamente abrió el envoltorio de su nuevo teléfono, y apartó bruscamente con la mano a Mobilete, que cayó directamente a la papelera de la habitación de Pedro.

Mientras Pedro abría su nuevo móvil, oyó unos suaves llantos que provenían de la papelera. Dejó de desenvolver el paquete y echó un vistazo para ver de donde provenía el llanto.

Cuando se dio cuenta de que era su viejo móvil Mobilete, le vinieron a la cabeza Sigue leyendo

EL MONSTRUO TUERTO

Había una vez, un monstruo muy muy malvado que trataba de hacer la vida imposible a los ciudadanos del reino donde vivía.

En uno de los pueblos del reino, había un señor que había perdido uno de sus ojos en un accidente de trabajo, es decir, que era tuerto. Pues bien, siempre que el monstruo pasaba por ese pueblo, iba a visitarle a su casa y se reía de él. Le decía: «Señor tuerto!! ¿Me ves bien? Jajaja!«.

 

Cuentos infantiles - el monstruo del lago Ness

 

Hasta que un día, después de que el monstruo llamara al timbre de la casa del ciudadano tuerto, éste, una vez que oyó como se metía con él, cogió una piedra y se la lanzó al ojo derecho del monstruo.

El monstruo empezó a gritar del dolor, y posteriormente se dio cuenta de que Sigue leyendo