Cuento Corto Infantil para niños y niñas, creado por: Tomas Vanni
Tomás estaba un día en su casa e intentó encender su consola, pero no podía y probó de mil formas para arreglarla, pero fue imposible. Le preguntó a todos sus familiares, todos menos a su padre y sus abuelos porque el creía que no sabían nada de consolas.
Después invito a su amigo Nacho a su casa y le contó su situación, le preguntó si él sabía como arreglarla, pero Nacho le dijo que le parecía algo muy difícil. Le comentó que se lo dijera a su padre, que sabía como arreglarlo, pero Tomás le decía que su padre no sabía nada de eso.
Después de que Nacho se fuera a su casa, Tomás decidió consultar su problema por internet para ver una forma de arreglar su consola, pero no encontró nada.
Después de pensar y pensar llamó a su otro amigo llamado Rocco para preguntarle, pero él tampoco sabía como arreglar su problema.
La madre de Tomás le dijo:
– Llama a tu papa que él sabe.
A lo que Tomas le respondió:
– No porque papa no sabe nada.
Después de buscar formas para arreglarla, su madre le llamó para comer, entonces Tomás fue a la mesa, se sentó y comió. Su madre le dijo:
– Anda, ve a dormir que ya es tarde.
Tomás le respondió:
– Buenas noches mama.
Al día siguiente le preguntó a su abuelo, pero le dijo que él no sabia como solucionar el problema. Luego le preguntó a su abuela y ella le dijo que su padre sabia arreglarlo, pero Tomas le dijo:
– No, mi papa no sabe nada.
Al día siguiente le llevó la consola a Martín y el le volvió a decir que estaba ocupado, lo que lo llevo a tener que preguntarle a su padre. Fue a la oficina de él y toco el timbre, su padre le saludo y lo dejo pasar. Tomas le dijo:
– Papa ¿sabes como arreglar mi consola?.
Y el padre le dijo que sí, que le parecía una tarea fácil. Se la arregló y Tomás se puso muy contento.
FIN
– Moraleja del cuento: No subestimes a nadie sin saber nada sobre él.
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