Cuento Corto para niños, escrito por: Diana Alejandra Rodríguez & Hellmy Jasmin Zuñiga
Érase una vez en una casa grande, blanca y muy bonita, en la que vivía un gato de brillante pelaje, a los que sus dueños le decían Gordon.
Un día llegó a la casa un pequeño ratón llamado Lorenzo, el cual salía a comer a la nevera sin que el gato se diera cuenta.
Gordon era muy envidioso y creído porque sus dueños lo consentían mucho.
Al día siguiente Lorenzo salió de su pequeño agujero y se topó con el gato, el cual de inmediato grito:
– ¡¿Qué haces en mi casa?! ¡tú no eres bienvenido aquí!.
Lorenzo se giró y muy triste se dirigió a su pequeño huequito y en voz baja dijo:
– Yo solo quería ser tu amigo.
Una semana después, Lorenzo volvió a salir en busca de comida, no se había acercado al refrigerador cuando el gato le empujó.
Gordon dijo: – ¿No te había dicho que te fueras?
Y Lorenzo contestó: – Es que tengo mucha hambre.
– No durarás mucho, si no te vas, mi familia te matará. – Comentó el gato.
Gordon para asegurarse de que el ratón no volviera a su casa, le acompañó a la salida vigilando que no se fuera a escapar o esconder.
No pasó mucho tiempo cuando de pronto, se escucharon unos ladridos que cada vez se acercaban más. El gato se giró para ver quién era y se sorprendió al ver que era Doug, el vecino grande y muy fuerte quien al parecer no quería detenerse.
Gordon corrió lo más rápido que pudo, pero como él no hacia ejercicio, se cansó y tuvo que pedirle ayuda a Lorenzo, el ratón al que hace unos minutos había echado de su casa.
El ratón dudó mucho en ayudarlo, pero como su corazón era bueno y noble decidió ayudarlo.
Lorenzo pensó muy bien lo que iba a hacer porque solo tenía una oportunidad, era ahora o nunca. Si más demora vio al perro y lo mordió con sus grandes dientes para que así dejara en paz al gato.
El gato sorprendido y muy agradecido con el ratón por haberle ayudado le pidió disculpas por echarlo de su casa, le pidió que regresara y prometió no volverlo a molestar.
FIN
– Moraleja del cuento: No juzgues a los demás por sus diferencias, ya que tarde o temprano vas a necesitar de ellos.
– Valores del cuento: Respeto, tolerancia, amistad, confianza.
Comparte este cuento infantil con tus amigos en Facebook, Twitter, Google+,… o por Email, con el botón correspondiente a cada red social. Gracias.
Excelente cuento. Gracias.
fabuloso, excelente cuento
muy bueno