Samy era un sapito que todos los días se lamentaba, por que el quería volar como lo hacían las aves, las garzas y los pájaros, que pasaban volando a toda hora.
Un día en el estanque se encontró con una de las garzas más viejas del grupo. Y al verla le decía: – ¿Yo quiero ser como ustedes? ¿Volar y ver desde arriba todo?.
La garza vieja le decía: – ¿No quieras ser como los demás, tu eres así y eso es lo que importa?
Pasaron los días, pero Samy, sentía el deseo de volar. Una mañana se aproximó al estanque, cuando escuchó a una de las garzas llorar. Y le pregunto: –¿Amiguita que te sucede. ¿Porque lloras?.
La garza le respondió: –Me lastimé una de las alitas y no puedo volar.
Samy le dice: – No te preocupes, yo te ayudaré con unas hiervas y te curare.
Pasaron los días y las noches, cuando la garza se curó, pensó como agradecerle lo que había hecho Samy: –Pídeme un deseo, el que tú quieras.
-Samy: dice: ¿lo que yo quiera? Sigue leyendo →