Cuentos muy cortos - Harry el perro cachorro

COYO Y TUKY

Cuento Infantil para niños, escrito por: Luchito

Coyo y Tuky eran dos sajinos que fueron criados por un cazador llamado Macha. Quien hace tiempo atrás los encontró cuando aún eran pequeñitos.

Macha, había salido a cazar, llevaba su cerbatana y todo su instrumental necesario. También iba con su perro cazador, llamado Ñawa. Después de adentrarse en el tupido bosque de cangarizo, Ñawa empezó a inquietarse olfateando afanosamente. Su dueño había detectado una pieza interesante, así que colocó una pucuna dentro de la boquilla de su cerbatana y se puso en guardia.

Cuentos muy cortos - Harry el perro cachorro

Ñawa ladraba intensamente a cierta distancia cambiando continuamente de posición, hasta que su ladrido se escuchaba en un solo lugar.

– Debe ser majaz o añuge. – Pensó Macha. – Ya lo he encerrado.

Y fue en esa dirección abriendo paso con su machete cortando las malas hierbas existentes. Cuando llegó al lugar indicaco, Macha observó una gran piedra sobre su suelo algo húmedo, en donde se veía un hueco en cuya entrada estaba Ñawa rascando trabajosamente con sus patas delanteras y arrojando con fuerza hacia el exterior la tierra, con el fin de ampliar la entrada y poder atrapar su presa.

Mientras Macha buscaba la puerta de escape del animal, que se escondía allí, para bloquear y evitar su huida. Después de un buen rato y con la ayuda de su dueño, quien en todo momento se daba ánimo. Ñawa había avanzado como dos metros al interior de la guarida y se escuchaba ya los primeros enfrentamientos entre el perro y los que estaban en la defensiva, porque hacía parecer que eran dos por el rechinar de los dientes, la lucha era tenaz. Los dos bandos emitían alaridos desesperados y Macha animaba continuamente a su perro, y no pasó mucho tiempo que se escuchó el ataque formal de Ñawa empezando a salir de retrocedo, arrastrando a su víctima. Una vez en la superficie, Macha se dio cuenta que la presa era un sajino pequeño y le increpó a su perro para que lo soltara, ya que lo tenía atrapado por el cuello. Después lo metió dentro de un saco, pero Ñawa ingresó nuevamente a la cueva en donde se escuchó otro enfrentamiento, pero la lucha fue más corta porque el cazador se demoró mucho en salir otra vez trayendo a otro sajino.

Macha hizo lo mismo con el otro animalito, mentiendolo dentro de un saco. El perro se metió otra vez en la guarida olfateando con fuerza para ver si había otra presa, pero salió rápidamente y quería a toda costa sacar a los sajinos que entraban dentro del saco.

Macha los llevó rápidamente a su casa para curar las herida que Ñawa los propinó. Los dos sajinos eran machos y les dispuso acondicionamiento en su casa para criarlos amorosamente, y les puso un nombre; a uno le llamó «Coyo» y al otro «Tuky».

Macha supuso que un jaguar había atacado a la madre, y que ellos se habían salvado metiéndose en la cueva. Desde aquella fecha había pasado medio año, y los sajinos estaban muy bonitos, eran sus mascotas preferidas; donde él iba le seguían como si fueran fieles perros. Los animalitos prefirieron vivir en casa de su protector.

FIN

Comparte este cuento infantil con tus amigos en Facebook, Twitter, Google+,… o por Email, con el botón correspondiente a cada red social. Gracias.

  • Redacción
  • Historia
  • Enseña Valores
  • Educativo

Resumen

Cuento Infantil de un cazador que salió un día al bosque en busca de animales, junto con su perro. Cazaron dos, pero como eran pequeños los cuidaron en casa

2.3
User Rating: 2.7 (3 votes)
Sending